PA-PA...PA-PA

Las emociones implican algo racionalmente estructurado, en base al reconocimiento de un entorno y la percepción que otros tienen de uno para adquirir conciencia de, el “mi”. Cuando ostentamos placer este ensalzamientos de la conciencia a partir de los afectos en la experiencia, se funde en una tonalidad que coordina gran parte de la salud mental, como dice Guidano aquí hay una metáfora musical, una sinfonía se construye en torno a su tonalidad maestra. La Eloisa con su “PA-PA…PA-PA…” hace que la conexión con el entorno sea concretamente más positiva y optimista, respecto de lo que podemos lograr en los objetivos y perspectivas de vida, o sea como estamos parados aquí pero principalmente, cual es nuestro real aporte de altruismo a la especie. Como dice el Dalai Lama, grandes afectos implica asumir también grandes riesgos, pero si nos formamos en la ausencia o el abandono ya no son estos conceptos la matriz perceptiva para enfrentar el mundo, así es que esto de que seamos actualmente el país más depresivo podemos cambiarlo desde esta situación, desde la perspectiva de la necesidad del amor. Si tienes amor en tu vida entonces tienes al Dios acogedor y libertario ese que no te pide nada, sólo te ama y permite que tu expreses amor.