viernes, diciembre 31, 2010

Sobre el vacio, la realidad y tú.


Y que tal si un día de estos
te quedas sin artilugios,
sin internet,
sin el gato y tus perros,
sin tu mujer y tus hijos,
sin tu vecina y el cartero,
sin tu sofá y el control remoto,
sin la pandilla carretera,
sin la cama y el dormitorio,
sin las noticias o la tele,
sin las amigotas y la musiquita,
sin cigarros y revistas,
sin tu cuenta bancaria,
sin ley ni Dios que te ampare.
Que tal si un día de estos te asalta el vacío
y se queda a vivir un tiempo contigo,
sin estrellas en la noche y sol en la mañana,
sin colores sin amores,
sin paciencia o conciencia,
sin la oficina y sin el bar,
sin los libros y los discos,
sin cerveza o rock&roll,
sin pastillas para dormir,
sin supermercado y mall,
sin hospital o taxi,
sin la sombra de tus pinos,
sin estufa que encender.
Qué tal si un día de estos
tu silueta se diluye en un suspiro
y tu conciencia adopta el vacio
y te quedas dando vuelta en una órbita ingravital
y los días ya no transcurren ni consisten
y el tiempo desaparece,
se sumerge en la nada.
Que tal si no hay mensajes que contestar,
ni palabras que escribir,
ni movimientos para gastar,
ni fronteras que compartir o tocar.
Que tal si un día de estos te despiertas de una vez
y tomas conciencia que estar vivo,
es la experiencia mágica y sublime de estar,
el karma mayor del ser,
la encarnada inmanencia del azhar
enredándose en el misterio de existir.
Que tal si un día de estos te sientas a conversar
con los fantasmas de tu edad,
que tal si un día de estos,
hablamos en realidad,
de esta realidad.

viernes, diciembre 24, 2010

FELIZ NAVIDAD SERES HUMANOS

Si bien el budismo, el hinduismo, muchas creencias y religiones orientales, otras étnicas son de un enorme aporte a la cultura y la incultura humana, cabe decir que como estructuralista fenomenólogo o atiborrado y ecléctico creyente sobre la influencia de la historia estructural en el linaje y la complejidad de la misma en cada ser que percibe y observa, hay un elemento irrenunciable para analizar o pensar el comportamiento humano frente a sí mismo y el entorno, este es la experiencia, por cierto le agregamos la intuición y tenemos el fenómeno encarnado, vivido irrenunciable a la naturaleza humana. Esa innegable experiencia, me lleva a concebir el cristianismo como una experiencia encarnada mucho más allá de las escrituras, los salmos, evangelios, liturgias y toda la filosofía profunda de una tendencia religiosa o una religión propiamente tal. El cristianismo como cualquier otra religión o pensamiento, es en primer lugar una experiencia (para mi), sin ella no es posible lo trascendente, es más discrepo que exista la trascendencia por si misma, toda vez que es el cuerpo-mente el ente inmanente, que participa en el pensar y la promoción o movilidad que le dá sentido al pensamiento, constituye el elemento fundamental, sin él no hay pensamiento posible, de ahí mi crédito a lo inmanente. Pero para no desviarse del objetivo y hacer de este pequeño párrafo sólo una acción introductoria como acto de ordenamiento narrativo, debo decir que es en la experiencia (descrita)que aparece la natividad para la gran mayoría de los cristianos, el nacimiento, La Navidad, la Pascua, muchas acepciones, algunas equivocadas incluso y sus simbología transformada en herramienta mercantil, llámese Viejo Pascuero, Papa Noel, los renos, los regalos y las misma escrituras con reyes magos, con la granja y los pesebres incluidos.
La Navidad es entonces un elemento preciso para la ansiosa necesidad del ser humano de manifestar su sensibilidad ante la otridad y conste que no uso el término sensibilidad como acto de bondad solamente, más bien como elemento de reacción frente a un fenómeno. Es en la experiencia del otro en el cual el ser humano existe y consiste, por eso la imitación de las prácticas humanas es una condición fundamental de la biología del homo sapiens, así lo ha descubierto y muy bien utilizado el modelo económico neoliberal, basado en un sistema de consumo salvaje que hace que los regalos materiales sean el centro inobjetable de una fecha como es la celebración del cumpleaños de Jesús.
No me extenderé más en el tema, sólo decir que la navidad en un niño no tiene este análisis, que si bien todos podrían acusar que es trágico y salvaje engañar o malformar a los niños, nadie puede desmentir que el juego y los instrumentos para desarrollarlo como son los juguetes, son el centro de la felicidad de un niño al jugar, yo creo firmemente que un niño feliz augura una sociedad mejor, por eso para mi la Navidad tiene el sentido infantil, el olor a pino en Chillán, mi vieja amasando el pan de pascua y haciendo panes dulces, mi viejo que seguro estaría, los juguetes en la calle al día siguiente, el paseo familiar. La navidad sin duda es un momento de felicidad en la historia de cada uno. Personalmente pasé algunas navidades tristes, pero cuando fui niño y estábamos juntos, son el mejor recuerdo. Seguro muchos de ustedes también tiene ese recuerdo felíz, hay que apelar a ello y traerlo a esta navidad y hacer un minuto de oración o el tiempo que quieran de reflexión y recuerdo por los que no tienen ese momento de felicidad, deseando que lo tengan. Por eso mi pensamiento está en todos aquellos que quieren vivir la navidad sin embargo están sólos, están presos, están en la calle o desamparados o enfermos. Lo mejor de la navidad es que nos vuelve algo más humanos en la parte que me gusta del ser humano, que es la capacidad de amar con conciencia, el lado blanco de la especie, por que del oscuro ya hemos tenido suficiente. Mi regalo para este día es que todos, absolutamente todos puedan recuperar ese lado o que al menos seamos más, los que queramos canalizar esa energía para que nuestro entorno no se distorsione y termine con la vida buena. Feliz Navidad a todos los viejos pascueros incluso a los que se endeudaron a todas las mamás que amasan pan de pascua, a todos los tíos que envuelven regalos en los hogares de niños, a todos los anónimos que buscan una carta en el correo o invitan a un vagabundo a comer, a todos los de espíritu altruista que están por salvar la vida y hacer evolucionar la especie hacia un rumbo de solidaridad, Paz y Amor, más allá de si eres cristiano, budista, islámico, gnóstico, ateo, si eres ser humano, la navidad es la celebración del nacimiento, el nuevo hombre que debe nacer a diario para salvarnos. ¡¡¡¡FELIZ NAVIDAD HOMBRES Y MUJERES DEL MUNDO¡¡¡¡

jueves, diciembre 09, 2010

Vacunarse contra la rabia no es suficiente.

¿Cómo es posible que el perro mate al amo, que le deje sin sus extremidades superiores, como es posible que muerda la mano de quien le da de comer?

Bueno es un perro, es un animal. Se dice que somos tan diferentes como especie y sin embargo, aquella persona que en un momento te amó profunda y profusamente, aquella que daba la vida por ti aquella que viviría toda la vida por ti y para ti, aquella que juró su devoción… te mata, te muerde, te daña, te afecta negativamente, con tal de sacar la “rabia” y no hablo de casos públicos, como el de la Quintrala o los femicidios, parricidios, matricidios y todos los posibles de contar, sino de experiencias cotidianas, de esas que le ocurren a todos, que alguna vez en la vida les ocurrió o ocurrirá. Por lo menos para mí ha sido recurrente, por lo que creo que para muchos es igual, salvo que no valoran la situación como tal. Todos en algún minuto se han “enamorado” (embobado) o alguien se ha embobado por vos, en esa circunstancia conociste los mejores deseos de un extraño hacia tu persona, un ser humano fuera de tu linaje o tu red afectiva familiar. Le diste de comer, de beber, lo cobijaste, lo llevaste al veterinario, le diste cariño, lo sacaste a pasear, lo adulaste, lo bañaste, le enseñaste un lenguaje común, le diste un espacio en tu vida, lo hiciste parte de esa vida. Sin embargo, sin entenderlo demasiado en un día común y corriente hiciste algo que él no supo captar, que no supo entender, que no pudo comprender y sacó la rabia, los ojos desorbitados, la baba cayendo exacerbada, los dientes apretados como un riel al durmiente y todo termina en un gran charco de sangre, el amo yace en el piso y el can se vá con el hocico ensangrentado a unirse con otros de su jauría. Al rato lo encuentras en el mismo lugar donde espera que venga su amo a darle de comer, echado en la misma cama que usa siempre con los ojos caídos, moviendo la cola como el más tierno animal antes visto, pero su amo no está ya no tiene las manos para darle de comer ni acariciarlo, fueron amputadas por el daño que tenían huesos y tejidos. ¿Semejanzas?_ puede ser, puede ser… Cuantas veces ha sido el perro(a), cuantas veces ha sido el amo?